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martes, 17 de noviembre de 2009

El hombre, La Iglesia y Dios


Lamentablemente hoy en día la Iglesia como concepto general distancia al hombre (ser humano) de Dios, mediante dogmas y principios irreales, los cuales encasillan a Dios y limitan su mano a favor nuestro, nos dicen el cuando y el como acercarnos al creador, coartan también la efectividad de Dios y como logran esto?al no conocer a Dios en su totalidad, lo que el tiene para nosotros, la salvación, el reino y sus bondades.El guardar algunas formas dentro del templo (como lugar físico de reunión) es necesaria mente dogmático, donde se privilegia el no hacer ruido o afirmarse en el proscenio, dejando libertades como el hablar mal del otro.En la iglesia del hoy lamentable mente vivimos el llamado "evangelio del ojo" , comportándonos como cristianos solo dentro de un templo, cuando alguien te ve, cuando alguien te puede reprocharse tiene la creencia que por el solo hecho de asistir al templo somos automáticamente cristianos, bajo este parámetro si es que nos reuniésemos en un garaje... seriamos autos?Una frase típica y dañina es la de "no, así no lo hace Dios" y también unas de las mas utilizadas para tachar a alguien que pretende ser o actuar distinto a lo establecido, castrando vidas, matando sueños, truncando esperanzas y nuevos llamados. Debilitando el cuerpo de Cristo con la doctrina del error, controlando para ellos al creyente, sujetándolos a un lugar físico... el templo.El miedo y la des confianza que nos siembran algunos lideres, al ponernos a Dios en un lugar inalcanzable para nosotros, reservando para ellos "el ministerio de su presencia" poniendo así una barrea inalcanzable, situando a Dios por aya arriba. Lo cierto es que uno que se considero hijo, mas que siervo dijo: "baja a Dios de los cielos, y llévalo a la fabrica donde trabajas" (Martín Lutero)y por que dijo esto? des divinizo a Dios? , por el contrario solo dio a demostrar como habla un hijo de su padre, como puede este hijo correr a sus brazos, tener a Dios no solo al lado de nosotros, si , no dentro de nosotros, para que de este hombre nuevo salgan palabras de salud y salvación, el reconocernos como hijos de Dioses el primer paso para ser libres de lazo del dogma, por que Èl no le prometió el reino y sus bondades a sus ciervos, si a sus hijos; y esto es un principio: Si no exigimos a Dios su promesas para nosotros, es casi negar que el lo hubiese dicho, por que el Creador "no es hombre para mentir,ni hijo de hombre, para darse en arrepentimiento.

E.J Aravena
נְבִיא

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