Se habla mucho de cambio por estos días, pero el verdadero cambio que se requiere es el de volverse a Dios, volver al diseño original que contempla el reino de Dios, este que Jesus dijo con voz audible en su época, Mateo 6:31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?6:32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
6:33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
El problema con nosotros, es que dejamos el diseño y lo adornamos con doctrinas, formas y de rudimentos que no nos dejan ver la verdad, la única, que si es fácil acercarse a Dios y no esta reservado para algunos, por eso el al morir una de las cosas que primero aconteció fue que se rasgo el velo del lugar santísimo, otorgándonos a todos los atributos del sumo sacerdote, el ir a su presencia sin trabas, es como dijo Cristo mismo, cambiando nuestro chip mental, que nos inculcaron algunos líderes eclesiásticos, Mateo 5:38 Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente.
5:39 Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra.
Es haciendo este cambio es que surgiremos, el nos dice que no debemos apabullar a la gente con doctrinas baratas, que lo único que hacen es hacer inútil el sacrificio de Cristo, por que el dio la vida por nosotros para darnos libertad, y una entrada sin peajes a su presencia.
El cambio comienza por el espíritu, luego el alma, luego el cuerpo.
E.J Aravena
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